Todas las regiones de Chile contarán con proyectos beneficiados por el Fondo del Patrimonio Cultural, iniciativa impulsada por el Servicio del Patrimonio Cultural (Serpat), que es parte del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. De esta manera, fueron 101 las propuestas seleccionadas a lo largo del país en esta convocatoria, las que reflejan una heterogeneidad territorial y diversidad de ámbitos de acción en esta importante área que es clave para mejorar la calidad de vida de la comunidad.
En el caso de la región de Atacama, se destacan dos proyectos, ambos de la comuna de Alto del Carmen, que tienen como objetivo rescatar los saberes agro-culturales de Huasco Alto, a cargo de María José Araya, y avanzar en la revitalización de la cueca chilena en el norte chico, presentado por la Agrupación Folklórica Florecer Los Tambos, dando mayor valor a través de estas destacadas expresiones culturales al rico patrimonio y la memoria histórica de la zona.
Con una diversidad de temas y áreas abordadas, los proyectos seleccionados buscan resaltar las memorias y los patrimonios locales, como la creación de cuentos de kamishibai para conocer el patrimonio arqueológico de Tutuquén, la investigación sobre el paisaje cultural de la isla Alejandro Selkirk o la reedición de un libro sobre la tradición del trenzado en paja de trigo en Catemu.
El financiamiento del Fondo del Patrimonio Cultural también permitirá intervenir inmuebles, como las obras de restauración que se realizarán en las fachadas del mausoleo de la Sociedad Croata en el cementerio de Punta Arenas o la rehabilitación del teatro de la oficina salitrera de Humberstone.
En propuestas de diseño se beneficiarán iniciativas como la reparación de las galerías de la mina Chiflón del Diablo, el bosquejo del parque comunitario del Sitio de Memoria Ex Retén de Neltume o la ampliación del depósito de colecciones del Museo de Arte Moderno de Chiloé.Además, cabe destacar, que por primera vez este fondo concursable presentó una submodalidad para producir encuentros patrimoniales, por lo que también se apoyará actividades como la creación de talleres sobre prácticas patrimoniales, jornadas de diálogos participativos, ejercicios de memorias comunitarios y congresos.
